EMILIARMIJO, ilustraciones para bodas llenas de dulzura

Emilia Armijo estudió Publicidad y Relaciones Públicas, tiene un Máster en Gestión y Dirección de moda, formación como community manager y también en técnicas de ilustración y diseño gráfico. Y fue precisamente en este último terreno donde poco a poco, en gran medida de manera autodidacta, ha ido desarrollando su carrera profesional. Después de trabajar para varias empresas, lo vio claro. El mundo del diseño era lo suyo. Fue así como nació la marca EMILIARMIJO (Facebook e Instagram), hoy día bastante conocida entre los novios que buscan para su celebración detalles únicos y que no pasen desapercibidos.

Después de realizar algunos encargos para particulares y alguna que otra empresa, a Emilia le llegó un encargo que marcaría su futuro: unos meseros hechos a mano de muñecas del mundo con sus trajes típicos.

“Desde ahí decidí centrarme y estudiar bien mi público objetivo para saber cómo podía adaptar mis ilustraciones y poder dedicarme sólo a esto”, señala la ilustradora, que asegura que disfruta mucho cuando le llegan encargos de diseño de identidad  corporativa para empresas, pero que lo que más le emociona es el mundo de la ilustración. “Mi aportación en este mundo es enviar un mensaje positivo, tierno, dulce, con energía, llenito de amor… a través de mi trabajo”, recalca.

Emilia Armijo deja claro que no tiene un estilo definido. “Me gusta adaptarme al cliente, conocerlo bien, saber qué historia hay detrás de cada encargo para que cuando lo tenga en sus manos piense que es tal cual se lo imaginaba junto a una gran sonrisa”.

Pero aunque no tenga un estilo concreto, lo que más reclamo tiene ahora mismo son los retratos a partir de fotografías e ideas que le envía la gente. Estos retratos los realiza a mano o en digital, dependiendo del gusto del cliente, pero tienen una particularidad: son ilustraciones llenas de dulzura y ternura, con rostros pepones y muy sonrientes, para que al verlas transmitan una felicidad elevada a la máxima potencia.

El tipo de trabajos que más está realizando Emilia ahora mismo, aparte de imagen de identidad corporativa, son ilustraciones relacionadas con la familia, hijos, parejas, amigos y muchos novios. Muchas bodas. Tanto ilustraciones de novios y para los novios, como diseño de invitaciones de boda, meseros, photocall, minutas y todo lo que las cabezas de los clientes puedan imaginar.

Me apasiona lo que hago, el  trabajo que realizo  no es trabajo para mí porque disfruto tanto con él, que no puedo considerarlo como tal. Sólo puedo dar gracias por poder dedicarme a algo que me sale del corazón y que me llena y me ayuda a hacer felices a otras personas, y eso es indescriptible”, subraya la ilustradora.

Emilia Armijo usa varias técnicas. Depende de la personalidad que tenga cada ilustración, le motiva usar un tipo de material u otro. Se declara una apasionada de los rotrings, los rotuladores de acuarela, las acuarelas, acrílicos, guaches, óleos, lápices … Pero no descarta cualquier otra técnica.

Cuando se trata de trabajo digital, le gusta hacerlo muy limpio y sencillo, pero con detalles que sean significativos, con colores vibrantes y alegres.

Respecto a sus influencias en el trabajo, recalca que son la música, el cine, las historias que ve y lee o le cuentan… todo lo que le emocione en definitiva. “Soy muy sensitiva, me dejo llevar por las emociones que me transmiten las personas y cosas que me rodean”, manifiesta Emilia Armijo, que siempre considera su trabajo inacabado. “Sé que tengo mucho que mejorar y que puedo crecer mucho más. Pero tengo toda una vida por delante para descubrirme y superarme”, manifiesta.

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